¡Hola a todos!
Leer a esta autora es todo un placer y su último libro no podía ser menos. Una historia que te pone los pelos de punta y de la que no he podido despegarme.
SINOPSIS
Viena, 1993.
Una niña desaparece en un mercadito de Navidad.
Viena, 2020.
La policía encuentra un esqueleto infantil en el jardín de una casa de las afueras. Es el comienzo de algo peor.
Carola Rey Rojo, especialista en secuestros y homicidios infantiles, y madre de la niña desaparecida veintisiete años atrás, ahora en excedencia de la policía española, vuelve a Viena con el encargo amistoso de deshacer la biblioteca de un marchante de arte recientemente fallecido. Junto con su amigo y colega, el comisario Wolf Altmann, se verá envuelta en una trama que pondrá en evidencia que nadie es lo que parece y que uno nunca acaba de conocer a los demás, ni siquiera a sí mismo.
Lo que parecía un cold case se complica cuando, ahora que todo había quedado casi definitivamente atrás, otra niña desaparece en un mercadito de Navidad de la ciudad imperial de Viena, la esplendorosa ciudad de la música y el arte, que oculta tras las fachadas de sus bellas casas los más oscuros secretos.
<<Todo el mundo llega a los sesenta años con una mochila cargada a la espalda en la que ha ido metiendo los fracasos, los dolores, la culpabilidad, la rabia, las ocasiones perdidas, las decisiones mal tomadas…, todo el mundo. Pero los policías cargan una mochila mucho más pesada porque en la suya está también todo lo que han tenido que ver y oír a lo largo de su vida profesional, lo que las personas normales ni siquiera saben que existe en este mundo.>>
Elia Barceló me conquistó con «El color del silencio», uno de mis libros favoritos cuya trama me envolvió por completo, y una vez más lo ha vuelto a conseguir. Si bien es cierto que desde entonces para mí es una apuesta segura, no me decepciona con sus historias, y esta a pesar de haber supuesto un cambio en cuanto al género al que nos tiene acostumbrados, la he disfrutado de principio a fin enganchándome de tal manera que me ha durado apenas un suspiro.
Carola acaba de regresar a Viena, una ciudad a la que le une un hecho terrible que no ha podido superar y que le persigue cada noche en forma de pesadilla. Desde la desaparición de su hija hace más de dos décadas en un viaje familiar que realizaron cuando la pequeña apenas tenía ocho años, esta mujer no ha conseguido levantar cabeza, y aunque se encuentra mucho mejor, estar de nuevo en el lugar en el que vio por última vez a Alma hace que sus heridas se vuelvan a abrir.
Para esta especialista en delitos infantiles, regresar a la capital de Austria supone recordar lo que ocurrió aquella fatídica noche en un mercadito navideño, cuando su marido y ella perdieron de vista a la niña y ya nunca más volvieron a saber de ella. Desde entonces ambos cargan con una cruz que en su día les costó su matrimonio, y que son conscientes de que siempre llevarán a sus espaldas.
Con su vida rehecha y madre de un joven que ya ha superado la mayoría de edad, Carola, a un par de años de jubilarse y sin saber muy bien si quiere volver a su trabajo tras haber pasado por una situación difícil, decide pedir una excedencia y de esta manera tomarse un respiro. Por eso hacerse cargo de la biblioteca de un hombre dedicado al mundo del arte que acaba de fallecer le parece una buena opción y no duda en aceptarlo, poniendo tierra de por medio. Su sorpresa llega cuando descubre el lugar en el que va a trabajar, una majestuosa casa repleta de obras y libros que consiguen dejarla sin palabras, un asombro que se acentúa cada día que pasa y que hace que nuestra protagonista comience a sentir una conexión con el dueño del lugar, al que va conociendo a través de sus pertenencias y de su hogar, una vivienda que parece querer hablar.
Su llegada a Viena coincide con la aparición de un esqueleto infantil enterrado bajo el roble de una casa, y que tiene al comisario Wolf Altmann como responsable del caso. Éste y Carola se conocen desde hace unos cuantos años y si bien la alegría por el reencuentro es mutua, pues se sienten muy cómodos el uno con el otro, Wolf teme que lo que acaba de ocurrir salpique a su amiga y le haga revivir lo que ocurrió, bajándola de nuevo a los infiernos.
Lo que desconocen es que se enfrentan a algo mucho más complejo y duro de lo que pensaban, algo que va a complicarse hasta extremos insospechados y que requiere de una fuerza brutal para enfrentarse a ello.
A través de una trama que va volviéndose cada vez más espinosa y cruda, pero que para mí está creada de una forma magistral, nos adentramos en una historia que nos muestra lo despiadado que puede llegar a ser el ser humano, cómo la maldad puede alcanzar niveles desorbitados y más cuando las víctimas son los niños, algo que me ha encogido el corazón provocándome un dolor terrible.
La tensión y la intriga están presentes en todo momento, y a pesar de que hay varios personajes que tienen mucho peso en la historia creados como solo esta escritora sabe hacerlo, sin duda con la que más he empatizado ha sido con Carola, pues es imposible no ponerte en el lugar de una madre que ha perdido a su hijo y sentir ese dolor y desesperación en tus carnes, cómo ha tenido que continuar con su vida teniendo el corazón roto en mil pedazos, recordando día tras día lo que ocurrió y culpándose por ello. Unos sentimientos que transmite a la perfección y que sin duda te rompen por dentro.
Quiero alabar el trabajo de la autora que si bien la historia es ficticia, ha introducido datos y sucesos verídicos que la han hecho aún más real. Un trabajo que se nota en cada página y que a mí, sumado a su absorbente y cautivadora forma de escribir, me ha fascinado.
Si os gusta este género no puedo más que recomendároslo. Acaba de comenzar el año pero para mí se ha convertido en una de mis mejores lecturas, una que ha logrado ponerme los pelos de punta y que me ha roto en más de una ocasión, pero que toca tantos temas que me ha dejado reflexionando sobre cada uno de ellos. Cómo os comentaba antes, una apuesta segura.
Elia Barceló (Elda, Alicante, 1957) ha sido profesora de Estudios Hispánicos en la Universidad de Innsbruck, en Austria. Ha publicado numerosas novelas como «Disfraces terribles», «Anima Mundi» o «El secreto del orfebre», que le valió el reconocimiento internacional y el título de «la dama de los mil mundos». Su obra ha sido traducida a 19 idiomas, con gran éxito de público y crítica, consolidándose como una de las autoras españolas más internacionales de la narrativa actual. En 2017, con «El color del silencio», Elia Barceló se confirmó como una de las grandes autoras de la literatura española contemporánea. En 2018 también apareció «Las largas sombras», y en 2019 «El eco de la piel», todas ellas publicadas por Roca Editorial.
A continuación os dejo algunos detalles más de este libro:
Editorial: Roca Editorial
Primera edición: Octubre 2020
ISBN: 9788417968182
Páginas: 509
Precio: 20,90€
¿Lo habéis leído? Me encantaría conocer vuestra opinión
Espero que os haya gustado y si os apetece dejarme vuestras impresiones os espero en comentarios deseando leeros. Si queréis estar al tanto de los próximos libros que aparecerán en el blog y de las novedades de lectura os espero en Instagram @entrepaginasdelibros_
¡Que tengáis un feliz día y millones de GRACIAS por estar al otro lado! ♥